Soy Lia Cazzola
y quiero contarte
qué fue Diseño Humano para mi.
Te cuento sobre mi vida
Soy Lia Cazzola, nací en Mercedes, una pequeña y hermosa ciudad de Uruguay a orillas del Rio Negro, que tanto disfrutábamos cada verano.
Soy la mayor de 4 hermanas y viví allí hasta los 18 años, cuando me fui a estudiar a Montevideo. En ese entonces, comenzaba en la Facultad de Arquitectura.
Siempre me fue muy bien académicamente, pero a nivel social, mi vida era un verdadero desastre.
Mi infancia no fue fácil,
mi adolescencia menos.
Mi sentido de inadecuación y mi dificultad para socializar, me convirtieron en algo así como un zombie, que asistía por la mañana al colegio y por la tarde a un sinfín de actividades entre ellas el inglés, francés, flauta dulce, piano, natación…
Transité ambas etapas con un profundo sentido de desvalorización, despotenciación y una autoestima tan tan baja que hicieron que en mi adolescencia sufriera de bulimia, con la mala suerte que no sabía vomitar, por lo que engordé 30 kilos.
Fue otra etapa muy negra de mi vida. No podía ser como los demás, no encajaba por ningún lado.
Pero todo este sufrimiento fue el motor de mi búsqueda.
Búsqueda de libertad, de alegría, de sabiduría, de confianza en uno mismo, del verdadero poder de ser uno mismo sin importar la mirada de los demás. Me parecía imposible alcanzar esos lugares hasta que llegó el Diseño Humano a mi vida.
Ni los 20 años de terapia lo lograron.
Cada cumpleaños cuando había que pedir 3 deseos siempre me sobraban 2. Yo simplemente pedía ser feliz en cualquier forma y circunstancia en mi vida. Me di cuenta luego, que sin saberlo, esa era la libertad y el poder que buscaba, mi conexión con “la Fuente”.
Encontrarme con Diseño Humano.
Luego de estudiar Musicoterapia en la Universidad del Salvador, y estar casi terminando la carrera de Diseño de Interiores, me encontré sin buscarlo, con Diseño Humano.
→ Significó ampliar el entendimiento de que somos todos diferentes, en la comprensión de lo que significa HONRAR esa diferencia entre los seres humanos como partes indispensables y únicas de un puzzle que como humanidad somos.
→ Significó iniciar un proceso de limpieza de mi vínculo con la Fuente, con Dios o como queramos llamarle, y así expresar mi singularidad y comenzar a potenciarla.
→ Significó permitirme vivir cada vez más tiempo conectada con esta Fuente, donde uno fluye, es feliz y se expande. Y en ese fluir, tomar conciencia y maravillarme, de que esta expansión progresiva, tenía que ver con estar desplegando mi Cruz de Encarnación.
Mi Propósito y Misión de vida
La Cruz de Encarnación en Diseño Humano, nos cuenta el propósito último con el que como aspectos únicos de la Divinidad venimos a contribuir en esta encarnación.
Mi Cruz, es “Del Servicio”:
“Sirviendo a la sociedad, con un beneficio que excede el propio, a través de desafiar las normas con la alegría de vivir, y perfeccionando a través de ideas y formas, los patrones que no nos sirven para la evolución y expansión”.
Es así que mediante el Diseño Humano, un sistema básicamente lógico, colmado de patrones, colaboro desafiando y perfeccionando todas aquellas pautas y modelos de comportamiento, de ideas, de pensamientos y condicionamientos que nos separan de nosotros mismos, y en definitiva de la Fuente.
La importancia de un Paradigma
Entendemos por paradigma al sistema de creencias, principios y valores que lo sustenta, ordena, organiza y da propósito al estudio y la transmisión de un conocimiento. Así, un conocimiento tendrá un valor e impacto diferentes según el paradigma en el que se apoye.
De ahí que el Diseño Humano, como conocimiento de vanguardia, alcanza su mayor potencial si se apoya en un Paradigma “Elevado” de creencias, principios y valores Universales que nos conecten con nuestra esencia y nos alineen con este momento Planetario único de total cambio y expansión.
Principios donde la Conciencia ocupa el lugar esencial y que hoy están comprobados a través de la ciencia. Solo entonces, el Diseño Humano se utilizará con un propósito elevado e impactará a la humanidad haciendo posible la verdadera transformación y sanación individual: cuerpo, mente y espíritu.
Leer más sobre el ROL de la CONCIENCIA desde la ciencia y la biología»
Nuestro Paradigma
CONCIENCIA
Todo es mente y nuestro poder radica en la toma de consciencia.
De aquí el nombre de Diseño Humano Consciente. Sin toma de consciencia, que permita el cambio de creencias y de percepción no hay transformación ni sanación posibles.
Leer más sobre el ROL de la CONSCIENCIA desde la ciencia y la biología»
VIBRACIÓN
Todo el Universo vibra generando una fuerza magnética que solo une y a la que llamamos Amor.
Todo nuestro trabajo se apoya en este principio, y de ahí el slogan: “ELEVANDO LA VIBRACIÓN EN UN CAMINO HACIA EL AMOR A UNO MISMO”. Todo el conocimiento del Diseño Humano, utilizado con este propósito último de alinearnos con la energía de Amor que somos.
EXPANSIÓN
Todo en el Universo está en constante expansión.
Esta es una verdad liberadora que pretendemos transmitir en todo nuestro abordaje para que no sientas en ningún momento de tu vida que vas para atrás. El Universo y tú siempre se expanden.
Los 3 Principios
PARA LA TRANSFORMACIÓN Y SANACIÓN
Estos 3 principios se desprenden de nuestro paradigma.
Reflejo y responsabilidad
Mi exterior es reflejo de mi interior. Soy responsable de mi realidad interna y externa. Lo que doy, me vuelve.
Haciéndonos cargo de cada inseguridad y vulnerabilidad que se activa en nosotros, con la consciencia y las herramientas del Diseño Humano, las transformamos en confianza y poder interior y así, cambiamos nuestra realidad externa.
Polaridad Luz y Sombra
Las sombras como agentes clarificadores de nuestro camino. Gracias a abrazarlas y trascenderlas, vamos expandiéndonos ya que son nuestros impulsores de consciencia y colaboran con la creación de nuestra realidad.
Utilizamos el Diseño Humano como herramienta diagnóstica para identificar esas creencias limitantes y sus miedos asociados, que llamamos No Ser/Sombra, para así iluminarlas y permitir que nuestro Ser/Luz se exprese en todo su potencial.
Ritmos y ciclos
Cada proceso tiene su ritmo y su tiempo. Si vibras más alto, tu transformación se dará más rápida. Si vibras más lento, el tiempo de sanación y transformación será más lento. Pero todo es perfecto.
Desde este principio, no se fuerza nada y se permite el fluir, la integración y el proceso individual en cada paso del proceso de alinearte con tu Diseño Humano.
Rol de la Conciencia desde la ciencia
La Consciencia desde la PERSPECTIVA TRADICIONAL DEL DISEÑO HUMANO
Cuando miramos el gráfico de Diseño Humano desde una perspectiva tradicional, su paradigma establece que nuestro “código” no cambia y aparece una frase que dice “no tienes elección acerca de quién eres”. Acéptalo, o pasa toda una vida peleando con ello.
También dice, el “Diseño Humano no es espiritual” o solo sigue tu Estrategia y Autoridad y tu vida se resuelve, apuntando a que solo se trata de mecánicas, dejando fuera lo esencial: la Consciencia / Espíritu.
La Consciencia desde la PERSPECTIVA ACTUALIZADA DEL DISEÑO HUMANO
El nuevo paradigma en la ciencia, que impacta a todo el campo espiritual, nos dice que las creencias que surgen de nuestra percepción controlan e influencian nuestra biología y nuestras manifestaciones.
Desde la ciencia en la física de las partículas subatómicas, física cuántica, el observador (individuo con consciencia) tiene un rol clave.

Los experimentos de fines de siglo XX en física cuántica nos demuestran que algo tan simple como observar enfocando nuestra conciencia por un solo instante a un electrón hace que sus propiedades cambien. El experimento sugiere que el hecho de observar es un acto de creación: es la Consciencia la que está realizando la Creación.
En otras palabras, se comprobó científicamente que la energía y la materia que componen al universo responden a la mirada del observador. Esto significa que nuestra consciencia modifica, altera y transforma al universo. Somos los artistas y la obra de arte.
Nuestros pensamientos tienen la capacidad de transformar la energía en materia y la materia en energía. Todo sucede primero en la mente y luego se expresa en el plano material.
O sea que no somos simples espectadores que no tenemos efecto en el mundo que observamos. Pensar en nosotros mismos como participantes en la creación, en lugar de pensarnos como meros observadores, es cambiar toda nuestra perspectiva de cómo trabaja el cosmos.
En el área de la biología, desde este nuevo paradigma, si bien no podemos cambiar el código genético, si podemos impactar y modificar su frecuencia, la vibración con la que se expresa.
La forma en que vemos e interactuamos con nuestro entorno determina cómo se muestra nuestro código. Es la ciencia de la Epigenética. Nuestro fenotipo, “código”, no cambia, si su expresión.
Emociones, pensamientos y actitudes que están movidos por el miedo, rabia, celos o frustración, contraen nuestro ADN y nuestros dones no pueden manifestarse.
Pero cuando experimentamos amor, gratitud, confianza y alegría, nuestro ADN se distiende, se abre y nuestros dones pueden florecer.
Otra vez vemos el papel determinante de la “Consciencia”. En otras palabras, nuestras células y nuestra bioquímica se codifican por nuestra consciencia.
Entonces, cuando miremos nuestro gráfico, mirémoslo como un ser viviente en constante evolución y transformación. Nuestro ADN está continuamente escuchando y respondiendo a nuestros pensamientos, emociones y acciones, mucho más de lo que imaginamos.
¡NUESTRO GRÁFICO, UN SER VIVIENTE EN CONSTANTE EVOLUCIÓN Y TRANSFORMACIÓN!
Cuando experimentamos amor, gratitud, confianza, alegría, nuestro ADN se distiende, se abre y nuestros dones pueden florecer
Gracias
Gracias a Ra Uru Hu, el transmisor de este conocimiento. Gracias a Karen Curry, quien luego de años de trabajo ha “destilado” la enseñanza del Diseño Humano de una manera increíble y con quien me formé y recibí toda la información de Diseño Humano. Y Gracias a todos por tener el coraje de ser únicos y vivir su singularidad, por enriquecer y colaborar con la evolución del Diseño Humano, dándole su impronta única.
Lia Cazzola
Analista de Diseño Humano Consciente
Fundadora de la Academia Red Diseño Humano.